AMLO: conservador de derecha

18 de Junio de 2017

Llegaron, por fin, las elecciones en el Estado de México. El triunfo se lo llevó el PRI. Muchos analistas han comentado que, si la izquierda (Morena y PRD) se hubiera aliado, habría ganado y que, para la elección presidencial de 2018, si el seguro candidato y actual líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador, quiere ganar, necesita una alianza de izquierda.

López Obrador ya dijo que no habrá alianza. Pero lo que deseo aquí cuestionar es si es cierto que, de ganar AMLO en 2018, México tendría un presidente de izquierda.

Los conceptos “izquierda” y “derecha” son flexibles y han cambiado su significado a lo largo del tiempo. Sin embargo, al día de hoy, una persona de izquierda favorece totalmente los matrimonios entre personas del mismo sexo. Igualmente, apoya el derecho de las mujeres a abortar y no sólo no es machista sino que es feminista. Asimismo, defiende el medio ambiente y no es racista ni clasista.

López Obrador jamás se ha expresado a favor del matrimonio hombre-hombre y mujer-mujer. Mucho menos ha brindado su indudable apoyo al derecho de abortar. Ha dicho, eso sí, que, en caso de gobernar, consultará a los ciudadanos respecto a estos temas. Hace unos meses, esto fue lo que señaló:  “que la gente decida, y yo soy partidario de las libertades, pero cuando se trata de esos temas, vamos a que los ciudadanos sean los que resuelvan”.

Si Obrador fuera de izquierda, no sólo no diría que, en esencia, hay “libertades” que realmente no lo son ni que va a consultar a los ciudadanos sobre esas “libertades”; diría que buscará que todas las libertades de todas las personas se deben respetar y garantizar.

AMLO es un machista. En un artículo publicado en mujeresmas.mx hace unos días, Adriana Segovia nos recuerda que, para Obrador, las mujeres “se merecen el cielo”; son unas santas. Como indica Segovia, esto es reflejo de machismo (típico de conservador de derecha).

Cuando López Obrador fue jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal, ¿cuál fue su política estelar en materia de infraestructura? Los segundos pisos en periférico, los cuales incentivaron (más) el uso del automóvil. Un político de izquierda habría buscado mejorar sustancialmente el transporte público y desincentivar el uso del coche para así favorecer al medio ambiente.

Lo invito ahora a que reflexione, estimado lector, sobre el acrónimo Morena. Morena conlleva que lo no blanco, lo no “güero”, es decir, lo “nacional”, es necesariamente superior a todo lo demás (por eso Morena va a regenerar al país; lo va a salvar). Morena conlleva también que el “pueblo” (oprimido por la “mafia del poder” y los “pirruris”, quienes, en esta lógica, por definición no son morenos) es necesariamente moreno: no se puede ser rubio y pueblo al mismo tiempo. Así, Morena es la división entre buenos y malos, entre blancos y morenos, entre ricos y pobres, etcétera: racismo y clasismo, pues. ¿Exagero? Muy bien:  ¿qué pensaríamos sobre un partido, y del líder y fundador de ese partido, cuyo acrónimo fuera Rubio?

Se dirá que AMLO se preocupa por los pobres, por los desposeídos: sí es de izquierda. Vale recordar que las personas de derecha también lo hacen. De hecho su actitud hacia los pobres es paternalista (“pobrecitos” los pobres; hay que salvarlos)… justo como la de Obrador. Una persona de izquierda, al contrario, quiere que las cosas cambien a favor de los pobres porque éstos son individuos y merecen, como cualquier otro individuo, la oportunidad de desarrollarse plenamente.

Si AMLO gana la elección en 2018, ¿tendremos un Presidente de izquierda? No; tendremos uno de derecha (y ultra).

http://www.excelsior.com.mx/opinion/armando-roman-zozaya/2017/06/18/1170443

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