Estas líneas…



+ El PRI, vía PVEM, ya define candidaturas; la violencia nos abrazó; Víctor Marín, autor de la unión PRD-PAN en 2015, iría por el MAS


Agustín Rodríguez L.


GUAYMAS, Son. – Carlos Ernesto Zataráin González se escuchó seguro al contestarme hace unos días la llamada al celular y decirme: “Voy a estar en la boleta”.

“El Bebo” me dijo lo mismo meses atrás, cuando le cuestioné que no podría derribar murallas de quienes no simpatizan con su proyecto, pero entendido en esas cosas, expuso que no es sensato pensar en una posición si no está listo el consenso y sin acuerdos con quienes hacen ganar una elección y quienes votan.

Hace años trabaja fuera de Guaymas. Viene con frecuencia a su casa de Villa de Miramar y visita a su madre, doña Gloria, y se reúne con amigos, pues convivir con los suyos, recordar su historia, es lo que hace gente a uno.

La mañana de viernes me envió el mensaje sobre su renuncia a la Dirección de Concertación Social de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano. Le dije en tono de reproche –sentido que es uno-- que me había enterado por otros conductos. Me aclara, lo anunció en un grupo nacional en el que interactúa hablando de libros y temas así.

No me sorprende lo que Carlos hace para mantener contacto con todos. Como político se justifica, pero no todos lo hacen. Hay políticos “repelentes” y recuerdan a la gente solo cuando ocupan el voto. Por eso pierden.

Zataráin ocupó puestos de dirigencia priísta y administrativos desde el sexenio de Rodolfo Félix valdés; fue diputado local, alcalde de Guaymas y diputado federal. En 2009 no halló chamba en Sonora y consiguió un puesto en el gobierno de Nuevo León, de donde en 2012 saltó a la SEDATU con el apoyo de un amigo del presidente Peña Nieto, llamado Gustavo Cárdenas. Ese es el cargo que dejará el 31 de Marzo entrante.

Experiencia tiene. Desde noviembre el rumor lo situaba como futuro candidato priista a alcalde, lo cual aplaudieron hasta enemigos del pasado, vueltos amigos cuando demostró para qué debe servir un alcalde. Pero la diputación federal del 04, hoy de 41 municipios, parecía su destino.

Sea cual fuere el puesto, puede ocuparlo. Tiene talla, formación, experiencia y sobre todo, eso le reconoce la gente, no tiene la larga cola característica de los últimos alcaldes. Al revés de ellos, el actual incluido, mejoraría las cosas.

Pero la complicación que vive el PRI y ese raro juego de dejar todo en manos del Verde Ecologista, puede echar a perder el futuro de las siglas y entonces sí, una reelección de las dos que se intentan esta vez, daría la puntilla al municipio.

Por eso cuando Zataráin expresó que “voy a estar en la boleta”, hice mi análisis y concluí que como lo hizo cuando sacó a Guaymas del hoyo donde lo tenían las cuentas mochas del “Papito” Córdova, el “Rambo” que (des)gobernó entre 1985-1988, y dejó números negros en Tesorería, así lo haría hoy que el boquete financiero que impacta bajo la línea de flotación amenaza con hundir la nave guaymense.

Este domingo habría definiciones. Quisiera desayunar este lunes con una buena noticia para los guaymenses. A ver.


NOS ATRAPÓ LA VIOLENCIA

Inimaginable el terror de vecinos –niños y mujeres incluidos—al ver frente de sus casas, en el frente de guerra de Las Golondrinas, cuerpos decapitados o incinerados. Los autores de esta locura ya no se preocupan llevarlos a algún agujero en Empalme o en un cementerio clandestino en las bellas montañas de San Carlos.

En esa secuencia terrible que se vive, el lunes un comandante policíaco fue ultimado por hombres armados con precisión milimétrica, al mediodía, entre la gente en concurrida zona comercial.

Fue un reto. Pero la Policía no debe responder de la misma forma, aunque la dimensión del problema se confirma cuando el jueves, escudado por las sombras de la noche, dejó el puesto –y la ciudad—el fuereño jefe policíaco Norman Castillo, quien nunca demostró talla para el cargo.

Su renuncia (¿huída?) generó negativos comentarios entre los guaymenses. Pésima opinión también, de quien lo trajo. Norman se fue y se tiene que llevar –creo que ya se fueron también—a la docena de amigos y guaruras que se trajo a engordar la nómina municipal.

Lástima que eso no significa terminar con la violencia. Ese monstruo se dejó crecer, ahora nos aguantamos y esperemos el día que llegue un supermán a poner orden.

Por lo pronto, también en horas del mediodía, entre la gente, este sábado el fuego mortal se escuchó de nuevo y José antero Castillo, el nuevo comandante policíaco –interino por segunda vez, por la misma causa—confirmó lo esperado: un joven veinteañero se convertía en lo que me informan, es la ejecución 141 del trienio en marcha.


CUMPLEAÑOS

Este sábado se celebró el radiodifusor Heriberto Lizárraga Zataráin. Le mando un fuerte abrazo al legendario político de esos que había en Empalme cuando la ciudad estaba bien.

También Marcos Ulloa, quien tuvo discreta celebración pero suficiente para refrendar los muchos afectos que tiene. Igual lo hizo uno de los mejores dirigentes que ha tenido la CTM, Jesús Fajardo, quien ahora ocupa todo su tiempo en sus empresas de la construcción, sin descuidar el apoyo a su gente del sector.

Les reparto mi abrazo.


EL MAS, CON MARIN

José Guadalupe Curiel hace propuestas a gente inédita en el ambiente político, y a otros que con trayectoria nutrida, tienen visión y pueden ir por la alcaldía y diputación local amparados en las recién nacidas siglas del Movimiento Alternativo Sonorense.

Uno de ellos, el contratista Víctor Marín Martínez, quien hace 3 años inició aquí acuerdos entre PAN y PRD para ir juntos, o perderían. El perredismo estatal lo satanizó –como a Curiel—pero ahora ambas siglas hacen lo mismo, se unen para no perder.

Víctor, diputado local suplente por el PAN, se encuentra con Curiel quien podría hacerlo candidato a alcalde. La idea, a juicio de muchos, es muy buena.

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