Entretelones
Samuel Valenzuela
Samuel Valenzuela
Mientras limita la inversión privada, cancela o se apropia de fuentes de generación de energía eléctrica, el gobierno mexicano y la Comisión Federal de Electricidad lucen sin la capacidad suficiente para atender la creciente demanda por un servicio tan básico para la calidad de vida de la gente.
La tarde noche del martes se fue la luz en amplios sectores del territorio nacional que afectó a millones de usuarios de al menos 12 estados de la república, incluido Sonora con fallas de suministro en Hermosillo, Nogales y en varias comunidades rurales de la sierra, así como los valles de Caborca, Costa de Hermosillo, Guaymas, del Yaqui y Mayo.
La explicación del Centro Nacional de Control de Energía detalla que la emergencia se derivó por el alto pico de consumo dadas las altas temperaturas que afectan al territorio nacional, lo cual obligó a declarar estado de emergencia en el Sistema Interconectado de la CFE e interrumpir el suministro de forma rotativa de forma selectiva hasta lograr nivelar la energía existente con la demanda.
Manuel Barttlet Díaz.
Aseguran que la emergencia por falta de generación de energía frente a la demanda duró una hora hasta que se “llevaron a cabo acciones operativas conducentes”, pero lo cierto es que el apagón se mantenía en muchas regiones del país hasta la madrugada de este miércoles.
Si eso ocurre cuando aún no se entra al mero ardiente verano particularmente en el norte y el noroeste del país, Dios y todos los santos nos agarren confesados, o sea, nos agarren con plantas alternas para generar nuestra propia energía o bien con paneles solares fuera de la red de la llamada empresa de clase mundial, en donde como se sabe, allá en su cúpula campea la corrupción y la sordidez personificada por su titular Manuel Barttlet Díaz.
Dados los antecedentes de dicho sujeto como operador del fraude electoral en la elección presidencial de 1988, sobran quienes especulan y elucubran que el apagón del martes por la tarde solo es un ensayo de lo que se operará el domingo 2 de junio y la verdad es que no hay que tomar a la ligera dicha posibilidad dadas las urgencias del régimen para mantenerse en el poder, porque si no, hasta la cárcel podrían ir bastantitos, incluido el inquilino de Palacio Nacional.
No pasa nada, decía.
Los efectos de un apagón como el ocurrido y lo que de forma frecuente hemos sufrido por acá en nuestro vecindario, no solo le pegan muy duro a la calidad de vida de familias bajo el régimen de consumo doméstico, sino que representan incalculables pérdidas para la poderosa industria automotriz del centro del país, miles de horas hombre perdidas; colapsadas líneas de producción y suspensión de las cadenas de suministros, entre otras.
De tratarse solo de un tema climático y desequilibrio entre la oferta y la demanda y no preparativos para la caída del sistema el 2 de junio, obvio que Barttlet y compañía no han hecho con suficiencia las previsiones o se han quedado muy cortos, para que el monopolio de la CFE sea capaz de responder a la creciente demanda de energía que ya está encima por el tan analizado calentamiento global y por el natural crecimiento demográfico del país.
Y pachorrudo y ladino como es él, el presidente Andrés Manuel López Obrador recurrió a su tradicional displicencia tratándose de problemas de la gente; que no hay problema; todo está bien, nada de qué preocuparse, así como cuando dice que en México no hay más violencia, solo hay más homicidios o cuando calificaba de amarillistas a quienes lanzaban voces de alerta por la peligrosidad del COVID-19, padecimiento “que ni siquiera es mortal”, decía el idiota y convocaba a salir, a reuniones y se burlaba de quienes usaban cubrebocas y gel antibacterial.
Rodeado de incompetentes, pero muy leales, el presidente avanza hacia un cada vez más turbulento final de su mandato, con la muy cercana posibilidad de que sea llamado a cuentas para que responda por la tragedia durante la pandemia, por sus alcahuaterías a bandas de narcotraficantes, por sus complicidades en el enriquecimiento ilícito de sus hijos y demás, y si no es el próximo gobierno, el que lo juzgue será la historia y esa suele ser más implacable que una estadía en la cárcel.
Karla Córdova.
Vamos a dejar por la paz este tema porque antes de seguirle hay que ir a la gasolinera para avituallarnos de suficiente combustible para nuestra plantita de luz, no vaya a ser que Barttlet siga con sus ensayos para el gran apagón del 2 de junio próximo.
Reconocemos no haber podido ver las transmisiones del par de debates ya realizados entre aspirantes a las presidencias municipales de Guaymas y Navojoa, pero por el material informativo generado de dichos encuentros, el caso del puerto en proceso avanzado de reconstrucción, Karla Córdova requeteconfirmó su condición de favorita para seguir sirviendo a la comunidad porteña por tres años más y según opinión de muchos superó a sus adversarios de la coalición opositora y de un partido patito, de forma holgada, sin presiones.
En el caso de Navojoa los reportes son de una soberana paliza, una virtual masacre sobre un obviamente nada preparado para este tipo de ejercicios, el alcalde aspirante a la reelección Jorge Alberto Elías Retes, empresario de abolengo siempre al lado de la derecha ideológica y que por razones de la vida o de la muerte, se encontró de pronto como militante de MORENA y con el premio de gobernar a la Perla del Mayo.
Le dieron hasta por debajo de la lengua Jorge Luis García de León Morales, candidato de la coalición PRI, PAN y PRD; Jesús Adolfo Domínguez López del MC y la señora del Partido Sonorense, Berenice Jiménez Hernández, frente a un balbuceante debatiente oficialista que solo dio lectura a tarjetitas con información descontextualizada, sin responder a nadie, aunque eso sí invocando a sus santos y a la marca partidista, en una plaza donde quizás es más evidente la simulación de alguien que se quiere hacer pasar como liberal y progresista sin serlo, bueno, aunque esa competencia estaría muy cerrada porque en Caborca está El Cubano Mier y en Nogales Juan Francisco Gim.
Natalia Rivera G.
Por otra parte, mientras los de las otras esquinas se están dando hasta con la cubeta, con levantadas de faldillas de una y puñaladas traperas para el otro, la candidata de Movimiento Ciudadano a la presidencia municipal de Hermosillo, Natalia Rivera Grijalva mantiene incansable recorrido por todos los rumbos de la mancha urbana y comunidades rurales, haciendo lo que mejor sabe hacer: proponer soluciones a la problemática comunitaria e incentivar la participación de la gente en la toma de decisiones de instancias de gobierno.
Si querían un ejemplo de lo que debe ser una campaña de propuestas, ahí está la de nuestra amiga a quien no le arredra lo cuesta arriba que parezca su objetivo frente a adversarios que disponen de recursos al parecer inagotables en materia financiera; con instancias de gobierno como aliados, pero entretenidos en la denostación jurídica y en la búsqueda de resbaladeros, con una pregonando supuestas glorias pasadas y tratando de que pasen desapercibidos sus fracasos recientes y el otro sacando raja de su buena gestión al frente de la comuna.
Campaña provocadora, a ras de tierra, de estrecho contacto ciudadano; interacción con gremios de profesionales y un mensaje de quien sabe de tareas de gobernanza y sin cola que le pisen, así es el esfuerzo que despliega la candidata del paliacate color naranja atado en su muñeca derecha, llevando un mensaje innovador, coloquial y ausente de demagogia por todos los rumbos del municipio.
Encuesta presagios.
A propósito de la trifulca entre los equipos de María Dolores del Río Sánchez y Antonio Astiazarán Gutiérrez, lapidario el posicionamiento del vocero del alcalde con licencia, Eduardo Urbina, al abundar sobre presuntos actos de corrupción de la exsecretaria de seguridad, que seguramente dará de qué hablar en el debate del domingo, sin importar que tal tema no esté en la agenda de dicho encuentro.
De seguidilla con presunciones, en un ejercicio demoscópico a nivel nacional, la empresa encuestadora Arias Consultores coloca con ventaja sobre el oficialismo a 11 fórmulas al senado por otros tantos estados del país; al menos 10 en empate técnico, dos con el MC arriba y los restantes con prospectivas favorables para el oficialismo y verrugas.
Para los efectos de Sonora, los números de dicho levantamiento favorecen con amplitud a la fórmula encabezada por Manlio Fabio Beltrones Rivera y allá en lejano tercer lugar la fórmula de la ocurrencia y la estupidez.