Autoridades norteamericanas determinaron el cierre temporal de la garita fronteriza de Lukeville, Arizona, debido al creciente flujo migratorio que se registra en la frontera entre Sonora y el vecino país.
La determinación fue anunciada por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés), la cual tendrá vigencia a partir del 4 de enero y hasta nuevo aviso.
Aplicará solo para el puerto fronterizo de Lukeville, contiguo al municipio de Plutarco Elías Calles, Sonora, en virtud de que requieren enfocar los esfuerzos para detener el paso de personas indocumentadas por las diferentes entradas.
Sin embargo, ciudadanos perciben que lo anterior afectará a la dinámica binacional que existe entre ambos países, ya que quienes deseen cruzar la frontera ya sea al norte o al sur, deberán trasladarse a los municipios de Nogales o San Luis Río Colorado, ambas localidades que se encuentran a más de dos horas de distancia.
Activistas y propietarios de hoteles en el destino turístico de Puerto Peñasco, Sonora, prevén enormes afectaciones al sector, al considerar que se inhibirá el número de visitas procedentes de Estado Unidos.
La CBP de Arizona estima reabrir la frontera en tanto la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) genere mayor control en torno al paso de inmigrantes.
En el estado de Sonora se ha detectado un incremento en la migración ilegal en el último año, en el que han detectado a personas de hasta 190 nacionalidades intentando llegar a Estados Unidos.
Aunado a eso, grupos el crimen organizado sostienen una cruenta disputa por el control de los territorios fronterizos para apoderarse del trasiego de drogas, armas y personas.
