Respaldan Ley “anti-nalgadas”, presentada por MORENA violencia genera violencia, aseguran especialistas


EHUI Por Antonio López Moreno

Las medidas correctivas empleadas por algunos padres de familia quienes incurren en “nalgadas” u otras formas que involucran violencia física o psicológica a los menores, han sido erradas a los largo del tiempo y solamente han provocado aumentos en los índices de violencia.

Esa fue la respuesta de Jorge Avilés, un profesional de la psicopedagogía que actualmente es docente de educación media superior en la materia.

Debe recordarse que recientemente en el Congreso del Estado, fue presentada una iniciativa de reforma del diputado morenista Miguel Ángel Chaira Ortiz, para poder quitarle la patria potestad a los padres que violenten a sus hijos.

Al respecto el psicopedagogo consultado, coincidió con el legislador, pues dijo que en los procesos cognitivos de los menores, la violencia inminentemente genera más violencia y existe el riesgo de que el menor sea una persona agresiva en potencia.

“Lo único que estamos generando en el niño es más violencia, nosotros como violentadores lo único que hacemos tratando de corregir una conducta, es que el niño pueda asociar violencia en su entorno social, o sea, que violente a sus compañeros y que él también haya sido víctima, eso es lo que ocurre con la violencia, la violencia genera violencia”, dijo.

Así mismo, continuó el especialista, cuando el joven llegue a la etapa de la adolescencia, posiblemente asocie conductas agresivas tornadas como normales, toda vez que su comportamiento será un reflejo de su formación.

Incluso, advirtió que de llegar a sostener un noviazgo, el joven podría tornarse violento en su relación, al ser la única forma conocida para él de lograr sus cometidos.

Por tanto, Jorge Avilés recomienda adoptar otras medidas correctivas ajenas a la agresión. Detalló que existen “extinguidores de conducta” que los padres pueden emplear sin llegar a los golpes.

Su recomendación, emplear a los hijos tiempo fuera u otras formas de castigo; además de acudir a terapias psicopedagogas en familia.

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