El funcionario deslindó al gobierno municipal de la responsabilidad de interponer denuncia ante el Ministerio Público por los daños al edificio del Ayuntamiento, a pesar de que calificó como actos de vandalismo las pintas en las paredes y los dos vidrios rotos.
“Son actos ciudadanos que por decirlo de alguna manera ningún ciudadano los aceptamos, son hechos provocados por situaciones de inconformidad, todo mundo tiene el derecho a manifestarse pero ya cuando se rompen ciertas barreras pues se violenta la relación ciudadana”, expresó.
Como parte de las acciones realizadas por el Ayuntamiento, dijo que se envió una cuadrilla a la Plaza Zaragoza para recoger la basura y remover las protestas que se escribieron con pintura en aerosol en el kiosco y sus alrededores.