Entretelones

Samuel Valenzuela

Samuel Valenzuela

A 71 años de entrar en vigor la reforma al artículo 34 constitucional y del derecho de las mujeres de México a votar y ser votadas, el saldo puede considerarse muy positivo, aunque para efectos de la igualdad sustantiva frente al hombre persisten los rezagos.

En lo electoral y en la integración de la administración pública, la paridad está casi en su punto luego de un largo proceso que culminó con la elección de la primera presidenta de la república y estará en su mero punto cuando Claudia Sheinbaum sea ella misma, sea la mujer que por primera vez gobierna a este país y deje de ser una mala copia de su antecesor, del hombre al que trata de imitarle hasta gestos.

María Jesús Guirado.

Pero primero hagamos historia. Si bien la reforma constitucional entró en vigor el 17 de octubre de 1953, fue hasta el 3 de julio de 1955 cuando las mujeres de este país ejercieron su voto en una elección federal, aunque de forma muy limitada, desde 1947 ejercían ese derecho en los procesos municipales.

Para efecto de los sonorenses, María Jesús Guirado Ibarra fue la primera mujer en ocupar un espacio en el Congreso del Estado de Sonora, representando al distrito IX de Navojoa, de 1955 a 1959 en la XLI Legislatura, e incluso su nombre con letras doradas debe estar en la pared de honor de la sala de plenos de la Cámara de Diputados.

Está también el caso de Alicia Arellano Tapia, quien 10 años después de que se aprobara el sufragio femenino en México, junto a María Lavalle Urbina, fue una de las dos primeras mujeres en ganar por la vía de la elección popular, a la Cámara de Senadores de México, destacando además de ser la primera presidente municipal electa en Sonora por el municipio de Magdalena de Kino, y luego por Hermosillo, y la primera diputada federal representando a dicho estado.

Y de pilón, ser la mamá de la primera mujer gobernadora de esta entidad, Claudia Pavlovich, quien dicho sea de paso, fue ratificada como cónsul de México en Barcelona, gracias a los buenos oficios de ella y su equipo en favor de MORENA, en lo que todo mundo considera son premios ganados a la mala.

Griselda Álvarez.

Fue muy lenta la incorporación de mujeres mediante procesos electorales al ser desplazadas de los trámites de postulación de los distintos partidos políticos y no fue hasta 1979 cuando la primera mujer, Griselda Álvarez, fue electa gobernadora de Colima, avanzando lentamente con ocho gobernadoras entre ese año y el 2018, para llegar ahora a 13 mujeres en el ejercicio actual de jefas del poder ejecutivo de otros tantos Estados de la república.

A lo mejor para el 8 de marzo próximo cuando se festeje el día Internacional de la Mujer, la señora presidenta ya despliegue un ejercicio sin calcas varoniles y haga buena, responda a la supuesta confianza que depositó en las urnas la mayoría del electorado; deje atrás el obvio tutelaje de su antecesor y se libere de comisionados que la tienen cercada y acotada, para entonces sí sumarla a la legión de mujeres que admiramos.

Porque a excepción de muy pocas, admiramos a todas por el solo hecho de ser mujeres sin importar funciones en el servicio público o simplemente mujeres a secas en una sociedad que aún les debe mucho en el ámbito laboral y profesional, con riesgos de ser víctimas de abusos, feminicidios y condiciones adversas que no han sido resueltas y donde no se traducen los derechos ganados por la reforma constitucional de 1953.

De la sociedad civil admiramos especialmente a Juana María Olguín, la mujer más chingona que conocemos y hemos tratado, y a Sonia Valenzuela mi carnalita menor; del ámbito político, por referencias y por trato directo, a María del Rocío Chávez, Karla Córdova, Patty Ruibal, Paulina Ocaña, Natalia Rivera Grijalva, Wendy Briceño, Fátima Rodríguez, Zaira Fernández, Blanca Colosio, Gabriela Félix, Gabriela Tapia, Ivonne Andrade, Soledad Durazo, Sandra Romandía, Iris Sánchez, entre otras, y al más alto nivel admiramos por ejemplo a Norma Piña y Ana Margarita Ríos.

Claudia Sheinbaum.

Hay quienes han resultado una decepción y hasta son causales de vergüenza social como son los casos de Guadalupe Taddei, Célida López, Alejandra López Noriega, Elly Sallard, Claudia Pavlovich, Karina Zárate, Diana Karina Barreras, Yasmín Esquivel, Lenia Batres, Ana Gabriela Guevara y otras, para citar a algunas excepciones, afortunadamente pocas para nuestros efectos, afectos y desafectos.

En fin y como sea, mantiene vigencia lo planteado por Griselda Álvarez al asumir la gubernatura de Colima: “Vivamos un tiempo nuevo de plena igualdad con los hombres; sin privilegios que no requerimos, pero sin desventajas que no merecemos”.

Por rumbos del PRI en Sonora, inició la embestida del corrupto dirigente nacional Alejandro Moreno Cárdenas, en el marco de su estúpida riña contra el senador Manlio Fabio Beltrones, como si el desmantelar la estructura encabezada por Rogelio Díaz Brown detendría la debacle y la caída libre de esas siglas a nivel nacional.

En ejercicio de sus facultades el detestable campechano nombró a Luis Donaldo Coronado Rey como nuevo representante de ese partido ante el Instituto Estatal Electoral, desplazando a Ramón Ángel Aguilar, quien asumió tal responsabilidad por una decisión local al ceder el tal Alito dicha prerrogativa cuando las relaciones con los priistas de Sonora y sus liderazgos eran buenas.

Rogelio Díaz Brown.

Miren, luego de las recientes reformas estatutarias avaladas por las morenizadas autoridades electorales, Moreno Cárdenas no solo se reeligió, si no que puede hacer lo que le venga en gana e imponer una nueva dirigencia estatal sin importar que “El Roger” haya sido electo por un Consejo Político Estatal avalado por el mismo CEN o destituir a Onésimo Aguilera de la delegación  y mandar a alguien más que asuma funciones de dirigente o simplemente dejar donde está Díaz Brown y ponerle una cuña, con ánimos de que se vaya de forma voluntaria, a partir de que el de Cajeme seguramente actuará en función del mejor interés de las siglas de sus amores.

Hicimos algunas consultas y nos enteramos que las ruinas financieras del otrora partidazo son auditadas de forma permanente por parte del IEES en lo que corresponde a las prerrogativas estatales, en tanto que las del CEN pues esas ya de plano dejaron de recibirse desde que el senador Beltrones hizo público su rechazo a las intenciones reeleccionistas del corrupto, o sea, no tienen nada que auditar.

Durazo entrega casas.

En todo caso, si tanto odio le tiene al senador nativo de Villa Juárez, Sonora, y tantas son sus ansias de eliminar todo vestigio de dicho liderazgo en el CDE, pues que lo haga, que para eso, para ganar poder, ordenó la reforma estatutaria mencionada, o sea, por algo no ha perpetrado dicho abuso.

En mejor onda, el gobernador Alfonso Durazo Montaño, acompañado por el presidente municipal Antonio Astiazarán Gutiérrez, inauguró la primera etapa del fraccionamiento Altares, Sección Dorada, al sur de Hermosillo, como parte de un conjunto habitacional de interés social de 957 viviendas, cuyos primeros 188 lotes requirieron una inversión de cuatro millones de pesos.

Esta acción de gobierno es parte de un programa nacional para construir un millón de viviendas de bajo costo en todo el país y sacar del bache derivado de la crisis hipotecaria y restricciones presupuestales, a la construcción de casas de interés social, de las cuales para Sonora corresponden 35 mil acciones, de acuerdo con la información proporcionada por el gobernador Durazo Montaño.